Los inicios en la library
Hola!! El último día que fuimos a Lilongwe no tuve tiempo de enviaros nada… porque nos dedicamos prácticamente a responder a los miles de mails de respuesta que nos habían llegado. No sabéis la ilusión que hace cuando recibimos mails! En serio! Como si estuviera en otro planeta o algo por el estilo… El martes pasado encontramos un café a lo europeo total, con Internet Wireless! Así que nos llevamos los ordenadores y nos tiramos allí 3 horas… comimos allí y todo! Un planazo, la verdad… además luego hicimos la compra en un supermercado “Azungu” (para quien no se acuerde, azungu es blanco pero en tono despectivo). Total, que este super tiene muchísimos productos europeos.. pero claro, todo se paga… Mi champú lo tienen! Pero cuesta el doble! 16€… todavía creo que no me lo voy a comprar…
Lo importante es que ya nos empezamos a sentir más cómodos, ya nos empezamos a mover un poco por nuestra cuenta, y eso es porque ya estamos bastante asentaditos… Llevamos ya tres semanas y ya me doy cuenta de que mi vida en el proximo año está aquí. Tengo una especie de rutina horaria, que da bastante estabilidad, pero para nada es una rutina de todos los días lo mismo. Todos los días hay un niño nuevo que se sabe tu nombre, o todos los días hay un niño que ha aprendido a escribir los números gracias a tu dedicación extra de media hora con él a solas…
El tema es que el director de la escuela, Mr. Banda, es un hombre simpático, tirando a joven y un buen relaciones públicas. En cuanto me tiré 3 días viendo como funcionaba la biblioteca vi que necesitaban cambios y un poco de organización, así que junto con Francis y Omega (la chica Malawiana que trabaja conmigo en la biblio), hicimos un horario con los diferentes grupos que iban a ir a la biblioteca y la tarea que se iba a desempeñar con ellos.
Le di en una hoja este horario a Mr. Banda (que se quedó un poco boquiabierto, porque no paré de hablar y de decirle como habíamos llegado a hacer ese horario y no le di mucho tiempo para reaccionar… dijo “sisi… mañana te lo doy” jajaja!!). Le pedí que lo viera con los profesores de los distintos cursos, para ver si nos dejaban sacar a una media de 20 niños por clase durante una hora. Me lo devolvió con un par de cambios y ya lo hemos puesto en marcha. Está funcionando genial!!!
Todos los dias de 8 a 9, preparamos las clases del día (supone hacer a mano 100 plantillas de ejercicios con la clase de ese dia, es decir, 500 semanales). De 9 a 10 doy clases a niñitos de 6 o 7 años a escribir los números e identificarlos. De 10 a 11 nos dedicamos a los de 8 años al abecedario y a que escriban e identifiquen las letras y de 11h a 12h cogemos cada una un grupo de 7 estudiantes de una misma clase y les enseñamos a leer, nos tiramos en una alfombra (que le pedí a las sisters que nos regalaran para hacer de la lectura un hobbie y no una obligación. La alfombra es de bambú, claro…) y por turnos van leyendo en inglés. Es impresionante como niños de una misma clase que tiene unos 12 años, tienen niveles tan distintos. Que una niña te lee hasta con entonación perfecta y su compañero no sabe leer pa-pe-pi-po-pu… Así que hoy he apuntado los nombres de los niños que no tienen ni idea de leer, para hacer horas extras con ellos… a ver que tal!!!
En la misión cada día es mejor, en serio. Todos los niños nos buscan para hacer cualquier cosa. Ramón jugó con ellos un día al ahorcado y buenoooooo… fliparon! Les encanta!! Así que ahora juego con ellos siempre después de terminar un libro!! Les cuesta mucho aquello de adivinar la palabra, pero eso les da igual, lo que les gusta es decir las letras por turnos y saber si la que han dicho está o no en la palabra. Mi misión ahora es conseguir que cuando falte solo UNA letra, adivinen la palabra!! Jajajaja!! Solo lo he conseguido una vez… casi me echo a llorar de la alegría!! Además les he puesto un paso más difícil; si dicen F, tiene que decir una palabra que empiece por F... así consigo que se les entienda mejor y que busquen en su cabecita palabras que tienen olvidadas…
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